Tuesday, December 25, 2012

HISTORIA, CHELAS Y BEATS



Lunes 6 de junio Londres, Madrid, Berlín




Después de equivocarme y darme varias vueltas  por las estaciones en reparación , me subí al trencito famoso que te lleva al aeropuerto y me pegué su cabeceada.
Facturé y me dediqué a ver el duty free que estaba bastante bueno y barato, más barato incluso que otros, tanto que me arrepentí después de no haber comprado.

El paseíto en Rynair transcurrió sin problemas, pude ver al finalizar el viaje que la famosa trompetada es parte del cuento y aunque dormí todo el trayecto sigo estando raja.

Al salir de Londres llovía a cantaros, adivinen qué: en Madrid También!!y como nunca. En fin, fui a lo que iba, pero antes pasé a comerme un gazpacho (que me tenía antojada hacía rato)y una tortilla de papas, bendigo a mi intuición, pues jamás pensé que luego me dolería tanto la boca. Crucé al dentista (donde el regio, ese que está como pa enmarcarlo) quien procedió nuevamente,hasta la anestesia me dolió y me corrían loas lagrimitas mientras imaginaba lo terrible que podría ser cuando me pongan el implante noooo!!!!!. Luego de retirar los restos de mi paleta, vino lo bueno y la verdad es que el postizo es bastante mas piola de lo que imaginé, incluso bonito.

Como no había mucho más que hacer con esta lluvia, me devolví al aeropuerto, me sentía un poco mal.

Aproveché de actualizar este diario que había estado un poco abandonado y me dormí otra vez, ahora rumbo a Berlín siguiendo la tentadora invitación de mis amiguitos españoles.

Cuando llegué me percaté que el frente de mal tiempo llegaba hasta Alemania. Entre micros, tranvías y demases demoré como dos horas en llegar al departamento de Ana. Gracias a Dios encontré a una española que me prestó su celular para avisarle y a un alemán guapo que hablaba español y me dejó casi arriba de la micro, ya cerca de la dirección y envuelta con el poncho desastroso, en un carrito de kebabs encontré a un cantante de ópera mexicano quien me fue a dejar en taxi muy amablemente.

Al llegar Ana fue muy generosa conmigo, me hizo un espacio en su cama y al otro día cuando desperté cerca de las 13:00 me había dejado una notita y un queque de bienvenida :).

Martes 7 de junio, Berlín

Fue maravilloso despertar y tener un depto entero para mi sola, me bañé tranquila, me sequé el pelo, ordené mis cosas y hasta me paseé en pelotas. Además el lugar es lindo, cómodo, el barrio bueno y hay wi fi  -qué mejor?

Alas 6 habíamos quedado con Ana de juntarnos en su "curro", así que me tomé el día con calma y hasta me arreglé, cuando caminaba hacia el metro vi un pequeño mall al que no pude resistirme, entré, comí algo e hice pipí (fiel a mi estilo)también aproveché de buscarle un regalito a mi anfitriona..

Total que me entretuve un montón, los supermercados tenían miles de cremas y curiosidades a muuy buen precio, así que compré algunas cositas. Llegué un poco tarde a la cita porque además me confundí en el metro, pues hay una gran diferencia, aunque no muy perceptible entre el S (tren) y el V (metro) y las estaciones son las mismas.

Luego de encontrarnos caminamos un rato y me mostró la Postdamer Platz y la Alexander Platz, con su famosa antena de tv y los museos, de ahí fuimos a su casa a cambiarnos para más tarde juntarnos con Cristina y otra chica para comer en un lugar  famoso por sus hamburguesas cuyo nombre no tenía nada de original, es la típica picada callejera : Burguermeister. ¿No adivinó? Quiere decir algo así como el maestro de las hamburguesas.

Copuchamos y nos reímos de lo flaite del lugar antes caminar hacia un parque que tenía un barcito bien "guay", el Edelweiss. Ahí tomamos otra cerveza antes de volver y dormirnos tardísimo otra vez. Estoy raja, pero muy feliz.

En Berlín es todo moderno, y claro con la historia que tiene, no es para menos, está lleno de vida, no sé si es una ciudad bonita, pero es la ciudad de la gente joven, de la fiesta y de la droga. Súper progre!

El free tur parte a las 11:00 o a las 13:00, hice todo por llegar al primero, pero no hubo caso, soy humbertita pal metro. Llegué tarde un poco apestada, pero cuando vi una heladería Haagen Dasz me cambió la cara en un segundo, por Dios que son buenos! Caros pero valen la pena, así que comiendo helado del mejor del mundo, con baño y un cómodo sillón para ver como llovía afuera, las casi dos horas de espera se me hicieron nada escribiendo.

El recorrido lo hizo Arantxa, una española con pinta de alemana y duró casi cuatro horas! Como éramos pocos estuvo increíble pues podíamos comentar mucho más. Partimos en la Puerta de Brandeburgo, punto clave de la ciudad, tanto en la época del imperio prusiano como luego en las guerras mundiales. Ahí es el lugar donde se celebra todo y es el lugar que marca el camino hacia los palacios y donde también pasó el muro,o sea, más que neurálgico.

Llama la atención ver como los pocos edificios antiguos conviven con los modernos. A cada paso se huele lo que dejó la guerra y el recuerdo del sufrimiento judío a manos de los nazis, aunque hay que aclarar que lejos el pueblo que más padeció el exterminio y atrocidades, realmente fueron los eslavos (parece que no sobrevivieron muchos para contarlo).




Continuamos cruzando la puerta y fijando esta vez la vista en el parlamento. Su historia es bien curiosa, en la época creo que de Federico Guillermo o Guillermo Federico, al ver que el pueblo le pedía participación tras ver lo que había sucedido con Napoleón, le concedió al pueblo tener su parlamento pero fuera de los muros de la ciudad, por eso está pegado a la puerta.
Este parlamento, finalmente por diversas razones no se usó  hasta hace un par de décadas, antes fue casi un teatro donde el rey de todos modos siempre tuvo la última palabra.

Ya en el siglo XX el Bundenstag como se le dice en Alemán, se modernizó interiormente y acogió  la cúpula de cristal desde donde pueden verse los escaños y que simboliza que el pueblo es la base y puede ver literalmente como los parlamentarios hacen su trabajo.

Continuamos por el monumento conmemorativo a los judíos víctimas del holocausto. Es una plaza enorme llena de mas de 2000 bloques de hormigón que forman laberintos y dan la sensación de claustrofobia en algunos momentos. También pasamos por frías construcciones nazis muy grandes y que resistieron los bombardeos, hasta que por fin llegamos al muro, que a decir verdad es muy feo y para nada imponente. Ahí nos enteramos como fue que surgió la idea de construirlo (para que los orientales no se pasaran al lado occidental que económicamente era mejor y más libre) y como funcionaba.

También escuchamos algunas anécdotas, entre ellas la increíble historia de como en 1989 por un error comunicacional, 40 años de represión se vinieron abajo en dos horas, primero derribando la barrera sicológica del miedo y luego la física de este muro compuesto por tres partes: muralla oriental, espacio de la muerte con francotiradores y barrera occidental.

Por flojo, el presidente ruso de ese entonces, quien debía en una rueda de prensa, dar a conocer algunas reformas menores, al no leer la minuta y verse agobiado por las preguntas de los ágiles de la prensa, cometió el error de su vida y ante la persistencia de un astuto reportero italiano quién preguntó por qué no había hablado sobre las reformas respecto del muro (hacia el final de la conferencia) al revolver los papeles encontró entre los no leídos ideas de propuestas y sin pensar las anunció como aprobadas.

Así fue como una cosa llevó a la otra y desde ese minuto se anunció que dejaba de estar vigente la prohibición del paso entre las dos Alemanias. Esto sucedió un 9 de noviembre, fecha en que muchas cosas importantes se celebran aquí. El resto, ya lo sabemos.Las botellas de champán se descorcharon por días completos precisamente en la Puerta de Brandeburgo y aquellos oprimidos del lado oriental, por fin pudieron tomar Coca Cola y dejar de llevar un carrito para comprar un pan, no para trasladar el noble alimento, sino para llevar los cientos de billetes necesarios de una muy devaluada moneda.

El tur continuó bajo la lluvia mientras mis cavilaciones se dirigían a entender un poco de dónde viene la tolerancia y apertura de los europeos de este lado. Por ejemplo tienen una plaza (creo que se llama plaza París) donde se enfrenta una catedral luterana, otra calvinista y como los católicos también pidieron una, no hubo mayor problema y se las construyeron a la vuelta de esa misma plaza.

 Recorrimos también los palacios de la era prusiana, mientras escuchábamos las anécdotas de sus reyes, todos con los mismos nombres en distintas combinaciones y en versiones I, II, III y IV. Ahora esos edificios son teatros, museos, memoriales, óperas y universidades. En este punto me detendré no sólo por lo imponente de su fachada sino por la historia que encierra  la Universidad de Humboldt, la más antigua de Alemania e importante modelo mundial, por la que pasaron 29 premios Nobel y cuyos pasillos tuvieron el honor de ver los pasos de Einstein entre otros genios.Como ven, un cúmulo de inspiración que invita a quedarse paseando.

Pero como no todo puede ser afán cultural, cerca de las 8 me reuní con Ana y un amigo de ella, primero fuimos a comer unos kebab y luego cerveza en mano (acá es de lo más común tomar alcohol en la vía pública) nos fuimos a unos bares por el barrio. Aunque la cosa no pintaba tan prendida y tampoco la expectativa era tan alta,de a poco la noche y el bailongo tomaron forma...y qué forma!A poco llegar divisé a un tipo bien guapo y como donde pongo el ojo pongo la bala (dijo la humilde já) terminamos bailando, previos coqueteos, encuentro casual en la barra y una caballerosa invitación de él a otra cerveza.

Se llama Jan, tiene 33 y juega de local, parece que mi inglés no andaba tan mal por que nos entendimos perfecto. Lo fleché! ehhhh a falta de celular le di mi correo y quedamos de acuerdo en salir mañana!
Ana llegó a preparar sus cosas e irse al aeropuerto, yo me quedaré con su amigo y le entregaré las llaves, agradecidísima de su confianza. La verdad es que lo he pasado la raja!!

Jueves 9 de junio Postdam

Hasta hace un día nunca había oído de este lugar, o creo que sí pero no en lo términos que me lo han recomendado. Si mal no recuerdo en esa pequeña ciudad vivió la ex presidenta Bachelet, y si efectivamente así fue, debiera darse con una piedra en el pecho. Es un lugar maravilloso, deslumbrante.

Berlín quiere decir pantano, Postdam realmente no lo sé, pero es la pequeña ciudad donde los emperadores prusianos construyeron sus más grandes, lindos y lujosos castillos para venir a descansar (creo que en el siglo XVII) a sólo 30 minutos en tren desde el centro de Berlín.

Compré un pic nic y a las dos de la tarde ya estaba instalada con la boca abierta en Sanssouci, tras haberme perdido largo rato. Los puentes y barrios tipo holandés y judío atrapan  a cualquiera y deambular sola y completamente feliz por bosques y jardines botánicos con flores de loto y sapos encima hacen pensar que el príncipe puede aparecer en cualquier minuto :).



También vi un lago con castillitos a lo lejos, un molino de verdad al cual me subí y varios otros lugares como de película. Precioso! Me encantó Postdam, aunque sospecho que no conocí ni la mitad.

Llegando a mi centro de operaciones guardé la ropa que había aprovechado de lavar :) y alisté mis cosas, me conecté un rato mientras pensaba en que a la mamá le habría encantado conocer estos lugares, espero que se dé la oportunidad...y ahí estaba, un correo de Jan que me puso nerviosa y me demoré en responder, pero ya está, y a las 23:00 me vendrá a buscar a la estación del metro que me queda acá cerca.

Tomando unos tragos nos contamos las vidas y nos reímos mucho con las mezclas de idiomas, nos entendimos perfecto! si hasta coqueteamos en inglés los muy patudos! Él al parecer es un gallo bien, muy caballero no me dejo pagar nada (cosa que un amigo erróneamente me había advertido que era imposible por lo modernos que se supone son en este continente)le entusiasma su negocio, pero no por eso lo deja de pasar bien.

Es un tierno o yo una ingenua, me dijo que le daba lo mismo no dormir con tal de salir conmigo jajajajaha ah viajado harto y que como yo también adora los perros ¡Qué entrete es pinchar en modo internacional! Aunque es oriundo de Munich vive en Berlín hace ya muchos años. Como un buen caballero  me fue a dejar hasta la puerta de la casa y en el umbral me dijo que le había encantado, pero que no intentaría nada porque era un hombre respetuoso y se sentía privilegiado de haber salido con una niña como yo chúpate esa Cata!! Como para no creerlo.Así fue como me fui a dormir con una sonrisa, satisfecha de haberme llevado de esta ciudad algo más que un gran recuerdo.