Monday, January 07, 2013

Pinceladas del Este





Viernes 10 de junio, de Berlín a Praga

Camino al terminal de buses conocí a un koreano muy simpático, me encanta esto de conocer gente nueva en todo momento. Ayer también en el tren a la vuelta de Postdam conversé con un alemán bastante simpático. El transporte acá en Berlín me pareció  barato, el ticket diario  para zona A, B y C cuesta 6,80 euros al día, te puedes subir todas las veces que quieras y además llega a lugares como el que ya mencioné en el capítulo anterior, lo que es prácticamente otra ciudad.

Una vez en la estación comí algo y arriba del bus, que es a toda raja y chiquitito, conocí a unos argentinos con los que la revolvimos todo el camino, tal vez nos volvamos a topar.

Desde lejos, Praga ya luce preciosa y digo que luce para puntualizar que efectivamente es una de las ciudades más bonitas que he conocido.Llegando saqué 1200 KrCz (coronas checas) a $29 clp aprox, lo que me sobraría al final de mi estadía, por lo que podemos decir o que están en crisis o que  es un lugar muy barato, aunque claramente me alojé en uno de los hostales más pencas y aunque no se veía mal, lo corroboré al despertar con incontables ronchas de ...pulgas!! En fin  gajes del mochilero. Al menos tenía wifi, estaba al lado del metro, en pleno centro y cerca del terminal.

Al frente hay un Mc Donalds, cosa que nunca está demás y que agradecí después de probar una comida típica que espero no volver a comer jamás, definitivamente el goulash es más rico en Chile. "Mi" pieza es para diez personas, hay dos gringas simpáticas y una pareja de lesbianas pendex y locas, una rusa y otra de Hawai. To mixed!!

Me dijeron que acá no es tan seguro como en Berlín, así que a menos que me una a un grupo creo que no saldré de noche.Mañana será mi único día acá y habrá que sacarle el jugo. Dato rosa: se acuerdan de mi chanchito mini mascota? se me cayó en Postdam,snif! Espero que quien lo haya encontrado lo cuide.


La ciudad es preciosa, aunque bastante atrasada. En mi opinión, es muy notorio el sometimiento que que sufrieron por parte de los rusos y el comunismo. Y los resabios, por decirlo de alguna manera, persistentes.La persecución nazi también dejó cicatrices y su extenso barrio judío como es de esperarse fue uno de los más castigados.

La plaza principal, down town square es una maravilla con el  reloj astronómico más antiguo de toda Europa y la gran torre desde donde se aprecia la ciudad completa. Para variar en el free tur conocí a un grupo de españoles que hacían Erasmus. Con ellos rápidamente hice amistad y nos separamos del grupo hasta seguir nuestra propia ruta cruzando  el Moldava a través del verdadero museo - que es el puente Carlos el cual debe su nombre al Rey Carlos IV quien seguramente era muy religioso, lo que explicaría la gran cantidad de estatuas sacras que lo engalanan desde el siglo XIV.

El casco parece de cuento gótico con sus torreones y catedrales que congelan el aliento en la plaza del ayuntamiento y te llevan a viajar por épocas medievales al caminar por las callejuelas del Staré Mesto o ciudad vieja, con sus cristalerías tipo Swarovski y artesanías muy del tipo de las muñequitas rusas, adoquines y fachadas que dan cuenta de aquella época en que fue esta la capital de la región de Bohemia.

En un lugar con pinta de taberna nos detuvimos a almorzar  mientras amainaba la lluvia, acompañamos los platos con cerveza negra mientras la conversación fluyó hacia un dato para nosotros desconocido pero no menos cierto en torno a este brebaje: la cerveza no la inventaron los alemanes, sino los checos.

En Nové Mesto,la parte nueva  se encuentra el segundo mayor estadio del mundo y también está la plaza de Wenceslao, donde tienen comienzo y fin todas las manifestaciones del pueblo. Un lugar donde debe haber puesto mucha atención el célebre Franz Kafka para inspirarse en las virtudes y miseras que encerraba la sociedad heredera de todos aquellos karmas y años de principesca historia.

Viena

Nuevamente en bus tras escasas horas cambié de país y la diferencia es notoria. La ciudad tal vez no tiene tanto encanto pero mi hostal es casi un hotel y de los buenos ;). Aunque está a una media hora del centro no me demoré nada en instalarme y partir a reconocer el terreno, que es impresionantemente lindo y grandioso. Claro, como no, si por tanto tiempo fue la capital del imperio Austro- Húngaro y por Dios que se nota!

Lo primero fue dirigirme a la Karls Platz, punto central de la ciudad presidida por la enorme iglesia Karlskirche. Podría decir que esta es la capital mundial de la música clásica, los conciertos se suceden en los templos bastante seguido,acá nacieron prodigios como Strauss y Mozart.Si bien en República Checa también hay bastante de eso acá es definitivamente el sello.

Me gustó Viena, es tal vez un poco fría, con grandes monumentos, a ratos más cercana a la forma de ser alemana. Alcancé a ver algunos palacios y una manzana completa donde están todos los museos de arte contemporáneo, con un gran patio al centro lleno de barcitos muy taquilla. Al salir caminé por una suerte de alameda donde todo el comercio figuraba cerrado pero pude encontrar un Mc Donalds. Y adivinen qué...Sí! me atendió un chileno jajaaa.



Llegué a dormir bastante tarde pues me entretuve en los megajardines del parlamento y en miles de otras cosas. Una vez en el hostal la australiana que duerme en mi pieza me regaló un antihistamínico, parece que le dio nervio verme con tanta roncha!! En todo caso valoramos la preocupación y la generosidad.

Estuvo productiva la noche, aproveché de lavar ropa, comprar mi pasaje a Budapest y averiguar cómo tendría luego que moverme a Belgrado, pues desde allá sale mi avión rumbo a uno de mis más codiciados destinos: Grecia. También hablé con mi madre y con Jan, coqueteo que se ha mantenido aunque suene increíble. Me ha escrito harto, me encanta y me encantaría agarrármelo, obviamente lo digo porque sé que eso no va a pasar, qué fresca no?

He tenido suerte de que la mayoría de los sitios de interés están al aire libre o se aprecian mejor por fuera porque  hoy estuvo casi todo cerrado y mañana también es feriado, yo ni lo sospechaba, sé que es por motivos religiosos, aunque no sé exactamente cuales.Como sea, hay que poner manos a la obra, no es que no haya podido hacer nuevos amiguis acá pero a todos los que he conocido se están yendo, en vista de lo cual me lancé sola.

Empecé por Sphanplatz, dónde está la catedral de Viena, llamada San Esteban una de las construcciones góticas más altas y alucinantes del mundo, que rodean paseando varios coches a caballo, caminé por el centro comiéndome un helado grosero y llegue a un parque precioso donde cara de palo me puse a tomar sol en bikini tal como lo hacía la otra gente. Me sentí libre.

Seguí mi camino y llegué a una plaza con una construcción preciosa, ahí se celebraba algo, me sumé como una vienesa más y  me fui en volá comiendo pescado frito, papas y cerveza, para coronar la chanchada me compré un pretzel gigante relleno con nueces ¡Exquisito!No sé como pude seguir caminando, pero lo hice y así seguí recorriendo imperdibles como la Ópera y varios otros lugares históricos. Lo que no pude encontrar y me frustró un poco no hacerlo fue el museo de Freud,para otra vez será.

Estaba tan cansada que me fui al hostal a las 19:30 y me dormí la siesta de la vida, sólo desperté para  arreglar mis cosas, intercambiar datos con otros viajeros (ahí supe que me estaba perdiendo otras ciudades vecinas típicas de la ruta como Bratislava por ejemplo) y volver a soñar, mañana será otro el destino, me voy temprano a Hungría y reservé un hostal muy barato, que espero no sea una atrocidad.