Tuesday, February 22, 2011

La Lluvia, la Lista y la Nada

Una noche hablaba con alguien sobre lo que son las expectativas, fue una conversación de bar de esas que comienzan algo pudorosas, a tal punto que los temas se tocan tangencialmente, como si se hablara de otros.

Antes de eso hubo lluvia, durante no lo sé y después claro que también la hubo...y lo agradezco.

Siempre odié la lluvia. Olvidé contar que hece un par de años eliminé el vocablo "expectativa" de mi diccionario y de ese cristal tan delgado que algunos llaman conciencia, quise no tener que esperar por una promesa que no se cumpliría, evitar soñar con la mirada fija; escapar de la inocencia de quien piensa que el querer es poder cuando buscamos lo que no tenemos en otro; una falacia,rogar por algo sin tener la humildad de pedirlo.

El diálogo seguía y se formó algo en torno a una lista, condiciones para disfrazar búsquedas y las famosas expectativas.

Mirando el vaso vi también lo que tenía en frente y recordé cómo se alinean los cuerpos naturalmente para demostrar sincronía. Quise lavarme y ser sincera, a pesar de nunca decir que la esperanza era algo que yo no tenía.

Saliendo se armó el puzzle: perfecto igual que un error (no hay nada más perfecto que un error) y con prestancia me contradije,cuando me di cuenta que esperaba entrar en esa lista, que el aguacero me estaba mojando y sin embargo yo había deseado algo. Ese algo se estaba cumpliendo, bajo la lluvia una ilusión de niña se reflejaba en cada gotita y yo no trataba de arrancarme.

¿Cuándo fue que declaré que no volvería a esperar jamás nada? Lo recuerdo perfectamente, decidí no aguardar respuestas mías ni de nadie, cansada de que la noche se cayera estrepitosa para no retirarse.Ansiosa de ser libre y que no me importara el mundo, no depender, no pedir; así, sin azúcar. Ser fuerte se convirtió en lo más importante.

Antes de eso hubo lluvia, durante no lo sé y después claro que la hubo...y la agradezco, porque el tiempo se detuvo por un instante y ahí supe que yo misma también podía ser una expectativa y que la lluvia, la lluvia era una de las cosas más lindas que me estaba pasando.