Sunday, March 03, 2013

El Olimpo Parte II



Martes 21 de junio.
Cerca de las 15:00 llegué a Santorini, uno de los lugares que más deseaba conocer desde hacía años. Acá el hostal de 7 euros incluía ida a buscar y a dejar al puerto. Caterina y John es el nombre, nada muy elegante ni limpio pero con piscina y lleno de gente buena onda.
El lugar está en  el sector de playa Perissa. Tipo 4 ya estaba instalándome en la habitación para 8,  cuando aparece Rodrigo, un chico de Sao Paulo, muy simpático que estudia en UK. Fue él quien me aconsejó arrendar una moto de cuatro ruedas, yo esperaba que él me llevara a pasear pero definitivamente fue la mejor idea!

Por 15 euros me quede con una muy taquillera cuatrimoto por 24 horas, si uno va a estar poco tiempo es la mejor opción. Mi anfitrión no sólo me enseñó a usarla, también fue mi guía por todo el día, me creía la raja manejando por las carreteras de esta increíble  isla- volcán color rojizo, surcando sus curvas y parando en cada iglesita  a tomar una foto.Amo estos templos católicos que parecen hechos de cal y cúpulas azulinas, he visto en mi vida atardeceres lindos y este.

El paseo comenzó por la playa roja, que se debe a la actividad volcánica de otro volcancito que sobresale peligrosamente en medio de la bahía, allí la arenilla es áspera y rojiza como la lava que junto al agua transparente hacen el paisaje perfecto. Nos bañamos y reímos un montón mientras decidimos continuar nuestros diálogos en inglés.

Playa Roja
Y aunque se rían a veces me encuentro a mi misma pensando en inglés! Jajaja no es broma!
Después de un relajo y varias fotos agarramos moto y nos fuimos a Fira, la ciudad grande, que tiene unas vistas espectaculares. Allá  él todo mino me invitó un helado. Es exquisito, guapo y brasileño…qué más se puede pedir? Además muy preocupado, en la carretera paraba a cada rato para ver si yo venía bien, nos reímos tanto que nos auto-bautizamos Pinky y cerebro (yo soy cerebro por el casco y él pinky porque no lo usa).

Tras ver las blancas maravillas de los balcones que bordean Fira, casi oscureciendo nos fuimos a que es el típico pueblito bonito de las fotos: Oia,  es increíble como el piso de mármol y las cúpulas azules en medio de blancas construcciones que parecen caer por los acantilados. Es la cagaaa. Ya de noche volvimos a nuestros aposentos donde preparé unos sanguchitos de atún, tomate y mayo para regalonearlo por todo lo buena onda que se portó con esta chilena y por enseñarme lo placentera que se  siente la libertad  cuando conduces una moto. Me sentí todo el tiempo una chica superpoderosa. Después de bajar las fotos y compartir con los demás un rato, llegó la hora de un merecido tuto.

Hoy de verdad no entiendo qué pasó, tal vez sea la ansiedad por seguir descubriendo pero me desperté sola a las 7:30 am y llena de energía. Así que dejé mis cosas más o menos listas y agarré “mi” moto para ir a la bakery (panadería) que queda cerca y está abierta las 24 horas, atendida por su dueño, el mismísimo que está pintado afuera con gorro de cocinero, bigote, vestido de blanco y muy simpático. En la oportunidad me zampé (les juro que ninguna otra palabra se ajusta mejor) una especie de croissant gigante relleno de plátano, crema pastelera y chocolate mmm. Una vez repuestas las fuerzas la señorita “coraje” a lo más teleserie venezolana se puso su casco y se fue solita por la carretera semivacía a disfrutar por un par de horas más del sobrecogedor paisaje, la cosa era aprovechar hasta el último minuto.
Oia


También di vueltas por las pequeñas callecitas del pueblito de Perissa e incluso a eso de las 9 y media me tendí unos minutos en la playa que es preciosa, bajo un intensísimo sol.
Cuando volví, como me dio un poco de asco ducharme me tiré a la piscina, cinco minutos después iba con John camino al puerto. Ahí aproveché de darme un gustito, me compré un pack de revista Elle con dos ejemplares (en griego) de regalo traían una crema y un vestido de algodón verde limón..todo por 4 lucas!!
Como llevaba dos días sin conectarme mientras esperaba la embarcación me comí una tostada turca (jamón, queso y tomate prensado) junto con una copita de gélido vino blanco local, muy weno!. Junto a un mozo mayor y muy tierno que me decía que volviera porque le encantaba tener turistas sonrientes como yo, y es que estando aquí es imposible no sonreír.

Cuando revisé mi mail me llevé una sorpresa que debo reconocer me bajó un poco los ánimos. Jan se enrolló y no entendió mi parada frente al tema del hotel, cree que como no me había conectado ya no quiero nada . Mmmmm lata, parece que peligra el reencuentro, no quiero atados, le ecribí para expliare que no hay problema que todo ha sido un mal entendido y que a veces  los latinos pensamos diferente. Que no cancelara la reserva y que estaba todo bien. Con esa sensación y sin respuestas me embarqué. Este ferry es distinto, más chico, más bajo y más rápido, el famoso speed boat que además es más caro. Basto subirse para recordar lo que alguna vez leí y había olvidado, mi próxima parada, Mikonos, es gay friendly…no hace falta explicar por qué.
Traté de dormir lo que más pude durante el trayecto. Cuando llegué había un señor en un minibus esperando a los huéspedes del “Paradise beach resort” donde hice una reserva, tiene cabañas y camping y pedí una cabina beach individual por 23 euros..vaya a saber uno qué tal son.


Al llegar a Mikonos, comprendì que era "el" lugar donde habìa que estar, con restaurantes, bares en la playa, discotec, tiendas y hasta un minimarket "casualmente" distribuidos de una manera que no molesta a orillas de una playa dorada sembrada de cuerpos perfectos (a primera vista), donde oh! sorpresa! tras sucederse unos metros de pechugas al aire, a la usanza española, los cuerpos comenzaron a verse cada vez más desnudos, era hacia el final una playa nudista! siempre había querido ir a una, pero jamás había imaginado esos impúdicos cuerpos redondos, rosados e imperfectos a rabiar como los que vi y bastantes personajes mayoresnada sexies con importantes partes colgantes.

La pregunta del millón? No, no tuve las agallas para lanzarme, aunque amo nadar en cueros la educación tradicional pudo más que yo y el público debió conformarse una vez más con mi colaless amarillo (made in Brazil) y un desnutrido topless, una performance creo que bien digna en todo caso.

Luego de un rato me fui a dar una ducha con shampoo y todo jaja los baños era tipo camping y las cabinas son como el nombre lo indica unos cubículos donde cabína´h, pues cabe sólo la cama, la mochila y el huésped, nada más. Al rato ya iba arriba del bus que sale desde acá mismo rumbo al pueblo para ir al encuentro de los famoso molinos. Vi una puesta de sol maravillosa y humildemente debo decir que en menos de tres horas recibí al menos cuatro invitaciones y tres declaraciones de amor e incluso un copete arriba de una micro.(Se creerán argentinos?)

By the way el pueblo es precioso, tal vez con menos encanto que los de las otras islas pero lejos más taquillero, turístico y con una costanera perfecta para el sunset. Como tanto ajetreo me tenia medio mareada opté por comerme un giro donde alguien así como el rey de los giros (Jimy). Después me encaminé a mi cabañita a matar un centenar de zancudos antes de ir a la gran fiesta que se había publicitado para hoy, acá mismo. Pero los 30 me pasaron la cuenta y finalmente a las 12 me acosté rendida.

Dormirse a una hora decente tuvo su recompensa: estar a las 10:00 am de guata al sol en este paraíso, cerveza en mano hojeando una revista. En eso estaba cuando un pelao medio guapetón se acerca  a preguntar por mi cerveza, pensé que iba a multarme, pero sólo me dijo que debía estar tibia y en una sagaz jugada me la cambió por una más grande y más helada..maestro! A pesar de estar a torso desnudo ni me miró las pechugas! Se llamaba Boby y no tardó en mostrar los colmillos y ofrecerme hasta masajes el muy fresco. De ahí el resto se resume en dar las gracias contarle que me iba y efectivamente hacer el trayecto frenéticamente  a la inversa, bus, speed boat 3 a 48 euros desde Mikonos a Pireo (Atenas), metro hacia el aeropuerto y despegar esta vez rumbo a Belgrado sin saber bien que depararán las próximas horas. :)
Mikonos